Sumario: | Narra sobre la actividad misionera del clero poblano en Tlaxcalteca, su origen, extracción, número y características espirituales e intelectuales, su conducta, labor y esfuerzo. Señala que fueron primero los misioneros franciscanos, luego los dominicos y los agustinos, quienes evangelizaron la población autóctona y atendieron a la población europea que creaba problemas con su asentamiento en los núcleos indígenas, motivando la creación de poblados diferentes para separarlos, pero contando con el trabajo indígena para satisfacer las necesidades apremiantes de ambos. Se da la creación de gigantescas circunscripciones eclesiásticas, como las que se dieron a los obispados de Puebla y México, que abarcaban provincias étnicas, culturales, religiosas y políticas diferentes.
|