| Sumario: | La crisis que afecta a los presupuestos públicos y al Estado de Bienestar, ha llevado a plantear nuevos modelos de financiamiento universitario, que se distinguen según la forma en que combinan los siguientes objetivos: a) suficiencia financiera (disposición de los recursos necesarios), b) eficiencia interna (asignación de recursos dentro de la universidad), d) eficiencia externa (asignación de recursos entre las universidades) y d) igualdad de oportunidades (probalibilidad de que el acceso a la universidad sea independiente del origen socioeconómico de los alumnos). Respecto a la suficiencia, los nuevos modelos, suponen incrementos de la financiación privada, revaloración de la gestión y su relación con la gobernabilidad institucional, en cuanto a la eficiencia interna, redescubrimiento de la importancia de los incentivos financieros por sobre las intervenciones administrativas respecto de la eficiencia externa. Las variantes que adoptan los países, para asegurar eficiencia externa, usan distintos criterios: negociación, insumos, resultado y alumnos (siendo Chile el único caso en la asignación vía alumnos.) En este marco general el autor examina en detalle el caso de las políticas de financiamiento de las universidades nacionales en la experiencia argentina. Los resultados de estas políticas son, primero, que el sistema universitario nacional continúa predominantemente orientado a la formación de profesionales y, segundo que es poco eficiente en el desempeño de esta formación, pues el costo de la producción de egresados es muy elevado.
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