| Sumario: | La biblioteca pública es una institución que día con día cobra mayor importancia, ya que tiene un valor incalculable en la lucha contra el analfabetismo; reúne y conserva el conocimiento acumulado por la humanidad durante miles de años; proporciona los elementos para disfrutar de momento de recreación; auxilia en las tareas de estudio e investigación. Existe en ella una serie ilimitada de posibilidades para que la comunidad encuentre satisfacción en la lectura y en las otras actividades culturales que se realicen: exposiciones, talleres, proyecciones representaciones teatrales etcétera. Es esencial que la biblioteca incida en la vida de la población; que participe en el cambio social como un elemento dinámico, central, integrado, que responda a las necesidades específicas de todos los habitantes de la comunidad; de otra manera, no se justifica ninguna inversión en ella. Resulta difícil imaginar una biblioteca pública sin usuarios; sin ellos, los materiales, los catálogos y las mesas son un mundo vacío e inútil. Por esta razón, la labor del bibliotecario no se limita a organizar los recursos y a esperar la asistencia de lectores. Es necesario que los miembros de la comunidad en la que se encuentra la biblioteca sepan que allí está todo un conjunto de materiales esperándolo.
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