Sumario: | La obra de Vasconcelos es rica y profusa[4]. En ella se encuentran los problemas esenciales del quehacer filosófico, particularmente los relacionados con el devenir humano, en tanto humanista consecuente[5]. El tema del hombre, particularmente el mexicano y el latinoamericano, asoma a cada instante[6]. Igualmente su religiosidad es recurrente, pero al margen del fanatismo y los fundamentalismos estériles, ya que está vinculada estrechamente a los problemas vitales del hombre, a sus valores humanos[7], en beneficio del prójimo y la sociedad en general. En fin, es un Maestro fundador de la cultura latinoamericana, que mira el horizonte con ojos humanos para bien de todos[8].
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