| Sumario: | El cambio climático generalmente se asocia con el calentamiento y las condiciones climáticas extremas que afectan el medio ambiente humano y los sistemas terrestres, pero también tiene efectos profundos en el océano, que es probablemente la característica más singular y sustentadora del planeta Tierra. La consecuencia más directa del aumento de la concentración de CO2 en la atmósfera es la "acidificación del océano", un término que se refiere a la reducción del pH del agua de mar, pero abarca una serie de cambios químicos que afectan a los organismos marinos desde la formación de conchas hasta la reproducción, la fisiología y el comportamiento. Los océanos también se están calentando al ritmo de la atmósfera, y de hecho almacenan la gran mayoría del calor adicional generado por el aumento de CO2 y otros gases de efecto invernadero en la atmósfera. Este calentamiento está causando que las especies marinas más móviles redistribuyan hacia los polos y más profundo, y está causando una alta mortalidad en más especies sésiles, como las que construyen y habitan los arrecifes de coral. Pero el calentamiento también conduce a una disminución del oxígeno disuelto en los océanos. Para los ecosistemas marinos tropicales, la combinación de acidificación de los océanos, calentamiento y desoxigenación continuará impactando los ecosistemas marinos en el futuro. El alcance de estos impactos depende del camino de la energía que sigue la sociedad y de nuestras habilidades para reducir otros factores estresantes y ayudar a la velocidad a la que las especies pueden adaptarse y migrar a entornos más adecuados.
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