| Sumario: | Este trabajo pretende, concientizar al lector y a la población docente, en el establecer un proceso educativo y formativo de seres sociales, que no solo deben ser efectivos en su rendimiento académico; sino afectivos a su entorno social y cultural. Promover la formación de educandos activos en el bienestar comunal, que se ocupen no solo de alcanzar éxitos en el campo académico y laboral; sino que además apela a su desarrollo emocional e interpersonal sano. Lo que implica, un modelo de educación que sea integral, ocupándose de la formación de cimientos cognitivos y emocionales en la población estudiantil. Por lo que promover un comportamiento basado en valores, a través del ejemplo y el continuo reforzamiento de conceptos y acciones, es clave. Es imperativo el ejercicio de un proceso educativo holístico, que apueste no solo a los contenidos de estudio, propuestos en los diferentes programas de académicos; sino que en forma paralela se integren aptitudes y comportamientos influenciados en valores, necesarios para el desarrollo de una vida social plena y exitosa. Este proceso investigativo, involucra tanto a estudiantes como a docentes, en primera instancia por tratarse de los agentes primordiales del sistema educativo, y a su vez por su aporte a través de la aplicación de los instrumentos de recopilación de información, como encuestas y entrevistas.
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