| Sumario: | En los últimos años se observa una creciente demanda de pequeñas unidades formativas encaminadas a lograr la actualización o profundización de determinados conocimientos y capacidades. Esta formación ha salido del entorno educativo tradicional para ser ofertada por empresas, organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, asociaciones profesionales, etc. Con todo, las instituciones educativas tradicionales en los distintos niveles de la formación están realizando importantes esfuerzos por no quedarse atrás. Pese a su creciente aceptación, estas unidades formativas cortas plantean importantes interrogantes; sobre todo, desde el punto de vista del aseguramiento de la calidad y el reconocimiento, a fin de colmar la asimetría informativa entre proveedor y alumno. Las instituciones europeas son conscientes de los retos planteados y han presentado distintas iniciativas para abordarlos. En esta ponencia damos cuenta de los problemas planteados y del enfoque europeo para resolverlos.
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