| Sumario: | El estudio se realizó para la Cuenca del Río Chiriquí, ubicada en la Provincia de Chiriquí, en la parte occidental de la República de Panamá, entre las coordenadas 8° 15’ y 8°53’ de latitud norte y 82°10’ y 82°33’ de longitud oeste. El mismo se llevó a cabo en la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), específicamente en la Unidad de Sensores Remotos. El objetivo de este trabajo era realizar un estudio de la Cobertura Forestal de la Cuenca del Río Chiriquí para el período comprendido entre los años 1987-2006 y poder establecer la tasa de deforestación para esa área. Para este trabajo se utilizaron tres imágenes satelitales de la Cuenca del Río Chiriquí de los años 1987, 2000 y 2006 proporcionadas por el Nodo Servir de la Nasa, instalado en Panamá y con el apoyo de la Unidad de Sensores Remotos de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP). Estas imágenes fueron clasificadas individualmente por medio del método no supervisado, utilizando el software ERDAS IMAGINE 8.5. Los tipos de coberturas boscosas identificadas en las imágenes fueron: bosques maduros (que correspondían a las áreas que no habían sido alteradas por el hombre), bosques secundarios (aquella masa forestal que se desarrolla de manera natural, después de la desaparición total o parcial de otra anterior) y los manglares (aquella masa forestal que puede desarrollarse en terrenos sujetos a intrusiones de agua salada). Por otro lado, del estudio de la dinámica de la cobertura boscosa de la Cuenca para el período de 1987-2006 se obtiene que la misma está cubierta por 36.30 % de bosques de los cuales 21.75 % son bosques maduros, 10.28 % son bosques secundarios y 4.27 % son manglares. La tasa anual de deforestación de 1987-2006 fue de -1.03 %, lo que representa una pérdida absoluta de 15,278.93 ha en 19 años, y una pérdida promedio anual de 804.15 ha de bosque, mostrando una situación favorable en comparación con la tasa anual de deforestación para nuestro país que es de - 1.12 %. Se concluye que el uso de información generada a partir de teledetección y de datos provenientes de sistemas de información geográfica permiten conocer aspectos muy importantes sobre la dinámica de los ecosistemas, lo que constituye una poderosa herramienta para identificar patrones de uso actual de la tierra y evaluar el impacto de las actividades antrópicas sobre las coberturas boscosas.
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