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|a Nellys Muñoz El trabajo infantil constituye actualmente un problema preocupante, por dos razones: por el número de niños afectados, que abandonan sus estudios y sus actividades de niños para dedicarse al trabajo, y muy especialmente por las consecuencias negativas que sin duda tienen este trabajo prematuro sobre el desarrollo físico y psicosocial de estos niños y niñas, así como, sobre el desarrollo económico y social de los países interesados. Se realiza un estudio de tipo descriptivo transversal, donde se busca conocer las características de algunas formas de trabajo realizados por los infantes, entre ellos el cultivo de café, cultivo del tomate, lava autos, empacadores de supermercados, secretarios de buses y limpia calzados; buscamos conocer el impacto social inmerso en esta realidad, así como los distintos riesgos ocupacionales de tipo físico, químico, ergonómicos, biológicos y psicológicos a los que se encuentran expuestos estos trabajadores en cada una de las tareas que realizan. Por último encontramos que un 80 por ciento de los menores trabajadores refieren haber padecido alguna molestia que la asocian al trabajo que realizan en la empresa; y dentro de los que han enfermado, se quejan principalmente de molestias respiratorias (55 por ciento) y gastrointestinales (36 por ciento).
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