| Sumario: | Toxocariosis sistémica o larva migrante es una helmintozoonosis que ocurre debido a la migración de larvas de nemátodos a través de los tejidos humanos, principalmente del helminto canino Toxocara canis, el cual puede infectar a los humanos, especialmente a los niños. La contaminación del ambiente con huevos infectantes de T. canis, eliminados a través de las deposiciones de perros, permite que el hombre sea huésped accidental al ingerirlos. La Larva Migrans Ocular (LMO), Larva Migrans Visceral (LMV) y Larva Migrans Encubierta, son las tres tipos de formas clínicas de la toxocariasis, que pueden afectar al hombre. Los niños entre 1 y 5 años son los más afectados y los factores de riesgo principales son la geofagia y el estrecho contacto con perros. La Larva Migrans Ocular (LMO) es la forma más grave de la enfermedad, siendo causa de endoftalmitis crónica, granuloma retiniano y retinitis periférica. Como el Toxocara no madura en el intestino humano, no es posible encontrar huevos del parásito en materia fecal y la confirmación diagnóstica se basa en la detección de anticuerpos contra los antígenos de T. canis por el método de ELISA. El objetivo principal de éste proyecto es la preparación y estandarizar la técnica de ELISA para el diagnóstico de Toxocariosis humana en nuestro medio. Se recolectaron especímenes adultos del parásito y a la vez se incubaron las ovas, extraídas de las hembras, para obtener sus larvas (L2). Se obtuvo el antígeno de excreción —secreción de la L2 y así se pudo estandarizar la técnica de ELISA para el diagnóstico de Toxocariosis humana.
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