| Sumario: | Los casos de envenenamiento por mordedura de ofidios se reportan en Panamá en unos 1686 y 1482, con una tasa de incidencia de 39.4 y 34.2 por cada 100,000 habitantes, según el último registro del Ministerio de Salud (2020-2021), en el cual Veraguas ocupa el primer lugar de las nueve regiones listadas. Porthidium lansbergii produce aproximadamente el 23% de los accidentes ofidicos (durante el período comprendido entre 2005 al 2011), por lo que es considerada la segunda especie con mayor número de casos en nuestro país después de Bothrops asper. El veneno de P. lansbergii se caracteriza por ser, principalmente, miotóxico y hemorrágico, siendo la mayor complicación, en los casos fatales, la necrosis tubular y la insuficiencia renal aguda. También, se ha demostrado que hay diferencias en la intensidad de los efectos ocasionados por las mordeduras de serpientes adultas y juveniles de esta especie, por lo que, este estudio, busca evaluar las alteraciones hematológicas y profundizar acerca del daño muscular que son generados por los venenos de Porthidium lansbergii juveniles y adultos, al igual que sus componentes enzimáticos relacionados con la miotoxicidad mediante ensayos in vivo e in vitro. En la evaluación de los parámetros hematológicos, no se observaron cambios significativos. Se demostró que ambos venenos presentaron actividad miotóxica moderada, pero con mayor intensidad para juvenil. En relación a la evaluación histológica, se observaron alteraciones en las células relacionadas con las dosis de veneno utilizadas. El índice mionecrótico producido por los venenos de adultos fue mayor al de juveniles. Mientras que, en los ensayos de la actividad hialuronidasa, el veneno de P. lansbergii adulto presentó una mayor actividad en comparación con juvenil. Al contrario, en las pruebas para medir la actividad proteolítica el veneno de juvenil fue el que presentó aumento en esta actividad enzimática.
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