Donde el infinito parece empezar.

"En su poemario Donde el infinito parece empezar, Ana Raquel desarrolla una astronomía de la cotidianidad. Explora así la fuerza de gravitación experimentada por el cuerpo, el paso del tiempo en dimensiones cósmicas y sus rupturas moleculares hechas rutina, su propia identidad constituid...

Descripción completa

Detalles Bibliográficos
Autor principal: Aquino Smith, Ana Raquel, 1991-
Formato: Libro
Lenguaje:Spanish
Publicado: Guatemala : F&G Editores, 2022.
Materias:
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040 |a Sistema de Bibliotecas USAC 
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300 |a 66 p. ;  |c 24 cm. 
336 |a texto 
505 |a Cometas de paso. A puro cuentazo. Autogolpe. Amor entre letras. Confesión. Cahuí. Cielo color ojos. Científicos afirman. De ocho a cinco. Desierto. Echar raíces. Efecto boomerang. Vapor estelar. Mi nudo. Espiral. Humana. Hoy me recogí entre chayes. Maletas hechas. Miedo. Injusticia. Mudanza a empujones. Sola. Altibajo. There´s someone in my head (but it´s not me). Pequeñas ficciones. Prófuga en otoño. Resurrección. Reflejarse en una rosa. Zona devastada. Sine qua non. Resistencias. Respiro. Senderismo trasnochado. Sinfonía en lo lamento. Bipolar. Su cicatriz (y la mía). Ajena. Supervivencia. Escapar(me). Terremoto. Ecos de una mente. Nada. Vámonos. 
520 |a "En su poemario Donde el infinito parece empezar, Ana Raquel desarrolla una astronomía de la cotidianidad. Explora así la fuerza de gravitación experimentada por el cuerpo, el paso del tiempo en dimensiones cósmicas y sus rupturas moleculares hechas rutina, su propia identidad constituida por polvo estelar y por las normas que arbitrariamente nos impone el sistema que constituye la atmósfera en la que nos encontramos y somos. Al mismo tiempo nos plantea una meteorología de la ausencia y una demografía de los pensamientos gestados a medianoche, producto de un contexto como el guatemalteco, este país "a la mitad del olvido". Para la autora la poesía es un escape, uno que se hace especialmente necesario los domingos y su característica nostalgia. Y es la poesía la que le permite navegar las contradicciones que resultan de haber nacido mujer en un lugar como éste, florecer "en contra de todo pronóstico." Humana, en femenino, antes cosmos y pez, pero luego propiedad del humano, en masculino. Los animales, como metáfora de sus emociones, le ayudan a encontrar las palabras para describir la sensación de habitar un cuerpo en el que las destrezas pueden volverse también pesadillas. Estos poemas expresan una fe secular en los vínculos y los afectos, en la posibilidad de reconciliarse con los demonios e, incluso, en la resurrección. "El dolor disminuye cuando es compartido", escribe y a la vez entiende que a veces es necesario hacerse añicos, volverse chayes para liberarse, y, quizás, esta vez, convertirse en ave: "todos podemos aprender a volar." De allí la necesidad de mantener dos maletas hechas detrás de la puerta. En ese lugar donde Ana Raquel escribe, convergen distintas opresiones. No todas le afectan por igual, pero es consciente de la necesidad de notarlas y comenzar a agrietarlas. Y este libro nos recuerda que el pensamiento, como la poesía, no es algo que hacemos, sino algo que nos pasa." (Luisa González-Reiche). (Copiado de la pasta). 
650 |a LITERATURA GUATEMALTECA 
650 |a POESIA GUATEMALTECA