| Sumario: | La industria tabaquera, históricamente, ha estado presente en muchas épocas. Tenemos que remontarnos entre los años 3000 y 2500 antes de la era cristiana, de los cuales datan las primeras apariciones del uso de esta planta con el fin de ser inhalada. El tabaco, también conocido por su nombre científico Nicotiana tabacum, es una planta herbácea y perenne, de la familia de las solanáceas, oriunda de América tropical y de cuyas hojas se produce la mayor parte del tabaco que se consume en el mundo. Este producto se ha empleado a lo largo de la historia de forma aspirada (tabaco en polvo), lamida (tabaco en pasta), fumada (tabaco de humo) o mascadas (tabaco en hoja). El tabaco, como ya se ha mencionado, a lo largo de la historia, ha sido utilizado para el consumo humano, pero no es hasta el año de 1920 cuando un estudio hecho por médicos alemanes de la época sacaron a luz un informe en el que se presentaban los efectos secundarios y, sobre todo, dañinos que el tabaco producía en los seres humanos. Si hablamos en términos generales de aportaciones al PIB de nuestro país, el tabaco no es uno de los rubros que sean realmente impactante; de hecho, su aportación a la balanza general de exportaciones e importaciones es relativamente baja. Además, debemos sumarle a eso que, entre los años 2008 y 2012, su producción en nuestro país ha bajado considerablemente hasta llegar al punto de bajar su aportación individual al PIB en un 12 por ciento. Las autoridades panameñas en los últimos años han optado por apoyar al productor panameño dándole cabida a su desarrollo, por esta razón los productores dedicados a la siembra de tabaco han podido volver a niveles que les permiten balancear sus estándares de producción. Los países a los cuales Panamá les exporta con mayor frecuencia el rubro del tabaco en los últimos años son Argentina, Países Bajos, Uruguay, Alemania, Estados Unidos de América y Honduras. Las exportaciones como tal se dan en denominaciones como tabaco sin desvenar o desnervar, cigarros (puros), (incluso despuntados) y cigarritos (puritos) que contengan tabaco lineal (tabaco sin desvenar o desnervar.) En cuanto a las importaciones de productos derivados del tabaco, también han tenido una baja muy considerable con respecto a otros años; de los países de los cuales Panamá recibe mayor cantidad de productos tabaqueros son Guatemala, Honduras y Costa Rica. El consumo de tabaco es un tema muy complejo y delicado de tratar, pues, si bien es cierto es un producto legal, tiene muchos requisitos para su libre y legal comercialización. En los últimos años, se ha dado con mucha frecuencia la entrada a nuestro país de productos tabaqueros de contrabando, lo cual afecta a los comerciantes que se dedican a este negocio de manera lícita. En nuestro país, los índices de consumo de tabaco años atrás eran altos para el tamaño de nuestra población. El Ministerio de Salud (MINSA) junto con otras instituciones, han logrado bajar el consumo del tabaco en Panamá con prácticas como las de elevar su costo, restringiendo la publicidad, creando conciencia en las personas de los efectos tóxicos que el tabaco produce. Las autoridades de salud han tenido un gran impacto en los consumidores de manera positiva, visto desde el lado de bienestar para la población, ya que con las regulaciones de las leyes de comercialización y las alzas de los precios, así como la prohibición de su publicidad han logrado bajar los índices de consumo. Esto supone la baja automática de importaciones y exportaciones.
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