| Sumario: | Hace un balance sobre la labor de investigación del historiador, quien debe confiar en conclusiones de otros investigadores y de la correcta interpretación de las fuentes, así como lidiar con sus prejuicios conscientes e inconscientes y visiones de mundo, donde la duda metódica y la idea preconcebida puede conducir a la deformación de las fuentes. Desarrolla un estudio crítico sobre la pregunta de que si hubo realmente entre los españoles del siglo XVI quienes sostuvieron la opinión de que los indios de América no eran seres humanos sino animales, o algo intermedio entre el hombre y la bestia. Analiza testimonios de lo que llama teoría animalista, en textos de Fray Bartolomé de las Casas, de informes oficiales reales, de cronistas como Fray Agustín Dávila Padilla, el Padre Antonio de Remesal, Fray Juan de la Cruz y Moya.
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