| Sumario: | Desde la suscripción del Tratado de Libre Comercio entre Centroamérica, República Dominicana y Estados Unidos en el 2007, se generan múltiples preocupaciones y cuestionamientos de la población costarricense, sobre los beneficios que éste pudiera traer a su economía y a la relación comercial a nivel internacional. Estas inquietudes generan que Costa Rica sea el único país que someta a votación del pueblo la ratificación de dicho convenio por medio de un referéndum en el año 2007, obteniendo un resultado a favor del 51,62% que es vinculante por ser mayor del 40% de los votantes. Pese a esta decisión, desde hace más de una década el tratado ha continuado siendo objeto de múltiples análisis, discusión y estudios, que permitan determinar si efectivamente el país está siendo favorecido con sus condiciones, o si por el contrario la decisión ha sido errada. Sumado a esto, varios de los países suscribientes pasan por procesos electorales convulsos, muy reñidos y estos cambios en los gobiernos generan además incertidumbre en las poblaciones, ya que, ante la entrada de un nuevo gabinete, se desconoce cuáles serán las directrices y acciones que tomarán, así como el impacto que estas vayan a traerle al capital del país. Por lo anterior, es relevante analizar el impacto económico a nivel de exportaciones de flores, plantas y follajes desde Costa Rica a Estados Unidos, en la relación comercial establecida en el DR-CAFTA y la influencia de las nuevas administraciones que se extienden en el periodo del 2017 al 2020 en Estados Unidos bajo el mandado del señor Donald Trump y en Costa Rica, el de Carlos Alvarado del año 2018 al 2021, las cuales se encuentran en el proceso inicial de su gestión.
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